LoL: De ganar Worlds a la cárcel; la triste historia de Toyz
El medio de Hong Kong, ganador del Mundial de League of Legends con Taipei Asasins en la segunda temporada del juego, ha sido condenado a más de cuatro años de prisión por tráfico de drogas en Taiwán, país donde se considera una infracción grave.
Tras contaros meses atrás que Toyz, exmedio de Taipei Assassins y ganador de Worlds en la segunda temporada de League of Legends, fue arrestado, por fin se ha dictaminado una sentencia. El propio exjugador se declaró culpable de estos delitos y su condena será de cuatro años y dos meses de prisión, aunque esta sentencia la podrá recurrir.
Hay que recordar, que según la ley de Taiwán, el delito de tráfico de drogas se considera grave y las consecuencias pueden ir desde una multa económica alta hasta el encarcelamiento. Al imputársele por varios delitos relacionados con esta rama, Lau Wai Kin, el nombre real de Toyz, ha sido condenado junto a otros siete personas, que le ayudaban en esta trama, con penas de prisión.
Para los usuarios de League of Legends que se iniciaron tarde en el juego o que no siguieron los primeros torneos internacionales a nivel competitivo, Toyz fue uno de los jugadores más destacados y aclamados de aquel Taipei Assassins. Hace ya más de 10 años, cuando lideró al equipo en uno de los torneos y hazañas más históricas logrando el título de campeón del mundo, con personajes tan icónicos como Orianna, campeona a la que le dedicó la skin conmemorativa por el título.
El taiwanés lleva sin jugar profesionalmente desde 2015, pero todavía trabajaba para League of Legends con transmisiones en directo y videos para YouTube. También estuvo en otros equipos de Manager o de entrenador, como el caso de G-REX, que fue el último equipo profesional de League of Legends en el que estuvo.
Desgraciadamente, y al igual que sucede en varios casos en el deporte tradicional en el que muchos jugadores se arruinan o se malogran, el mundo de los deportes electrónicos nos demuestra lo complicado que es muchas veces asimilar el éxito o como pasar de una etapa muy buena a nivel de competición a otra en la que dejas de competir y pasas en muchos casos al anonimato o a un segundo plano
